Prevención moderna de adicciones mediante intervención comunitaria
Para José C. Chowell, la prevención de adicciones es un proceso que debe comenzar antes de que exista cualquier signo de consumo. Su propuesta se articula en torno al modelo NEMISA-PRA (Prevención y Resiliencia Adolescente), un marco que integra educación emocional, acompañamiento familiar y fortalecimiento comunitario. Este modelo surge de años de observar cómo jóvenes en riesgo suelen estar expuestos a entornos donde falta diálogo, apoyo y acceso a actividades constructivas.
José C. Chowell destaca que la prevención real no comienza en los centros de rehabilitación, sino en casa, en las escuelas y en la conversación cotidiana. En su visión, los adultos deben aprender a reconocer señales tempranas como aislamiento, irritabilidad, pérdida de interés, conductas impulsivas y cambios en el rendimiento escolar. Sin embargo, insiste en que interpretarlas no debe ser motivo de juicio, sino una invitación a escuchar.
El modelo NEMISA-PRA propone tres pilares para fortalecer la prevención. El primero es la educación emocional, donde los jóvenes aprenden a identificar sus emociones, expresarlas y manejarlas sin recurrir a conductas de riesgo. El segundo es la construcción de redes familiares sólidas, donde el diálogo abierto y la presencia afectiva sustituyen al miedo y la crítica. El tercero es la participación comunitaria, con actividades deportivas, culturales y sociales que ofrezcan caminos saludables de pertenencia.
José C. Chowell afirma que la prevención moderna debe dejar atrás el enfoque punitivo que sólo genera distancia y vergüenza. En su lugar, propone un entorno donde los jóvenes se sientan vistos, escuchados y acompañados. Cuando existe un espacio seguro, la necesidad de buscar refugio en sustancias disminuye significativamente.
El modelo NEMISA-PRA plantea que toda comunidad tiene un papel esencial: maestros, padres, entrenadores, líderes comunitarios y amigos. La prevención —explica José C. Chowell— es un esfuerzo conjunto donde cada adulto es un punto de apoyo. En una sociedad donde los riesgos aumentan y la presión sobre los jóvenes es constante, su visión ofrece un enfoque humano, práctico y esperanzador.